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Plantilla para creación de contratos laborales
¿No sabes qué tipo de contrato laboral tienes que ofrecer a tus empleados? ¿Dudas entre más de una opción? No te preocupes, es normal. Te ofrecemos la información esencial que te ayudará a decantarte por un tipo de contrato u otro dependiendo de cada situación.
En la actualidad podemos distinguir hasta cinco tipos de contrato de trabajo: indefinidos, temporales, formativos, en prácticas y contratos de trabajo a tiempo parcial. ¿Qué aspectos hay que tomar en cuenta de cada uno de ellos a la hora de escoger el tipo de contrato ideal? Te explicamos qué te ofrece cada uno de ellos:
Contratos indefinidos
Este tipo de contratos se conciertan sin establecer ningún límite en la prestación de los servicios en cuanto a la duración del contrato. En caso de que quieras ofrecer estabilidad, compromiso y buenas condiciones a tus trabajadores, este tipo de contratos son los más deseados.
Dentro de los contratos indefinidos podemos encontrar el nuevo contrato de trabajo indefinido de apoyo a emprendedores. Con este contrato se busca fomentar la creación de empleo por parte de autónomos, emprendedores y pymes.
Contratos temporales
Si lo que buscas es un tipo de contrato para incorporar a la plantilla a un trabajador por un tiempo determinado o para una actividad muy concreta, los contratos temporales son tu situación.
Dentro de los contratos temporales podemos encontrar los contratos de interinidad. Su objetivo es el de sustituir a trabajadores con reserva de su puesto de trabajo. También se utilizará para cubrir temporalmente un puesto de trabajo durante el proceso de selección.
Contratos formativos
Este tipo de contratos se utilizan para fomentar la inserción laboral y la formación de jóvenes. Su propósito es el de proporcionar la cualificación necesario para el desempeño de una profesión. Todos aquellos jóvenes menores de 25 años o menores de 30 en zonas en la que la tasa de desempleo sea superior al 15 por ciento podrán optar a este tipo de contratos.
También optarán a los contratos formativos aquellos trabajadores en situación de exclusión social, víctimas de violencia de género o de terrorismo y personas con discapacidad en centros especiales de empleo. Este tipo de contrato tiene una duración mínima de seis meses y máxima de tres años.
Contrato en prácticas
El objetivo del contrato en prácticas es facilitar la práctica profesional de los trabajadores adecuada a su nivel de estudio. Los trabajadores que se acojan a este tipo de contrato deberán contar con una licenciatura, diplomatura o grado universitario. Aquellos técnicos y técnicos superiores de formación profesional, finalizada hace menos de cuatro años, también podrán acogerse a este tipo de contrato.
La duración de este contrato es de seis meses y puede extenderse hasta los dos años. Se podrán prorrogar por periodos mínimos de seis meses y un máximo de dos prórrogas. Este contrato, que se realizará por escrito, podrá ser a jornada completa o parcial.
Contrato a tiempo parcial
El objetivo del contrato a tiempo parcial es combinar una mayor flexibilidad en la gestión del tiempo al mismo tiempo que se llevan a cabo medidas que permitan un mejor control por parte de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social con el objetivo de evitar el fraude.
En este contrato deberá figurar el número de horas ordinarias de trabajo al día, a la semana o al mes contratado. También deberá quedar reflejada la distribución del trabajo respecto a lo previsto en el convenio colectivo.
No está permitida la realización de horas extraordinarias, pero sí que se puede ampliar la jornada en el contrato de trabajo a través de las horas complementarias. En el nuevo contrato deberá distinguirse las horas complementarias pactadas y las voluntarias.
Por lo tanto, a la hora de escoger un tipo de contrato u otro deberás tener en cuenta varios factores. Te ofrecemos una plantilla mediante la que podrás escoger el tipo de contrato que más te convenga:
Objeto de contrato: En primer lugar, necesitarás conocer el motivo por el quieres firmar un nuevo contrato mercantil.
Duración del contrato: Según la duración que queramos ofrecer al empleado podremos escoger una u otra opción.
Jornada de trabajo: Hay que tener en cuenta si queremos ofrecer un contrato que deba ser desempeñado en un horario concreto o si la empresa tiene libertada de horario.
Tipo de empleado: No es lo mismo buscar un empleado emprendedor, freelance, recién salido de la universidad o con experiencia.
Sueldo del empleado: Cada tipo de contrato te costará más o menos, dependiendo de las condiciones que ofrezcas a tu empleado.
Necesidad de la empresa: No siempre vas a necesitar un trabajador de carácter indefinido. Habrá momentos en los que tendrás que contratar gente para trabajos puntuales.
Condiciones laborales: No todos los tipos de contrato ofrecen las mismas condiciones para los trabajadores. Un contrato indefinido ofrece mejores condiciones y estabilidad para un empleado que un contrato a tiempo parcial.
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