La industria 4.0 es la promesa de una Revolución que está por llegar y hace referencia a una industria inteligente o ciberindustria, que eche mano de las nuevas tecnologías para reorganizar y cambiar el paradigma de los medios de producción.

Si no perteneces al sector industrial, quizás te estés preguntando en qué te afecta todo esto, pero lo cierto es que la Cuarta Revolución Industrial cambiará la forma en la que operan las empresas, modificará el entorno y traerá consigo un cambio en la manera en las que los negocios deben competir.

La industria 4.0 combinará técnicas avanzadas de producción y operaciones con nuevas tecnologías inteligentes que afectarán a las organizaciones, las personas y los activos.

¿Cuáles son las tecnologías de la nueva revolución industrial? Si la primera revolución vino de la mano de la máquina de vapor; la segunda de la mano de nuevos materiales y fuentes de energía como el acero, petróleo y la electricidad; y la tercera es la revolución científico-tecnológica hacia una mayor sostenibilidad, la revolución que viene en camino está ligada a la inteligencia artificial, la analítica, los robots y el internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés).

Las organizaciones, grandes y pequeñas, deben identificar las tecnologías que mejor satisfacen sus necesidades para invertir en ellas y no quedarse descolgadas, porque se arriesgan a  perder su cuota de mercado.

Los autónomos no son ajenos a la causa. La nueva industria conllevará muchos cambios, y no sólo en los productos y los modos de producción, si no que serán modificaciones que trascenderán los muros de una fábrica. Cambiarán también los productos, la cadena de suministros y, en su punto final, las expectativas de los clientes.

Los flujos de información y su transformación provocarán un gran cambio en las interacciones con los clientes,  marcando lo que estos esperan como consumidores, así que todos los actores deben adaptarse a los cambios que, por otro lado, también se reflejarán en al ámbito laboral, con la demanda de nuevas capacidades y roles; y la obsolescencia de otras profesiones, que tendrán que quedarse en el camino.

Algunos cambios de la industria 4.0


  • Flujos de información: serán continuos y bidireccionales. Se conocen domo PDP (physical-to-digital-to-physical) e irán del mundo físico al digital, del digital al digital (la información se comparte y se estudia mediante análisis de escenarios e inteligencia artificial) y del digital del nuevo al físico; cerrando así el circuito y traduciendo las decisiones del mundo digital al físico.
  • Aprendizaje: La simulación de entornos virtuales permite aprender de los procesos antes de ponerlos en marcha y, por tanto, antes de cometer errores. Simular el funcionamiento conjunto de máquinas, procesos y personas permitirá adelantar imprevistos o accidentes en un entorno controlado, antes de echar el proyecto a andar.
  • Robots y automatización del trabajo: No es algo nuevo, pero sí se dará un paso más hacia la robotización que conllevará la desaparición de algunos puestos de trabajos, y la necesidad de cubrir otros nuevos.
  • Gestión: La integración de sistemas internos y externos para gestionar la interacción de proveedores, el stock o el inventario es uno de los retos que tiene por delante la industria que viene.