Estas son las ayudas para jóvenes emprendedores

Emprender no es fácil, y esta dificultad se acentúa cuando los que quieren empezar un proyecto no cuentan con una larga trayectoria laboral que los avale o con el apoyo económico necesario, unos problemas que suelen ser recurrentes en los emprendedores más jóvenes. El perfil de emprendedor joven, por tanto, suele encontrarse con todavía más trabas de las habituales cuando busca emprender. Aunque los jóvenes dispongan de capital monetario (que no suele ocurrir) las entidades financieras suelen ser más reticentes a conceder préstamos o líneas de crédito, sobre todo en tiempos de crisis. Para hacer frente a las altas tasas de desempleo juvenil, muchos jóvenes ven el autoempleo y en el emprendimiento como una salida.  Para apoyar a estos jóvenes en su camino, hay algunas entidades que ofrecen ayudas a los jóvenes  emprendedores, ya sea en forma de aportaciones de índole económica u otro tipo de ayuda, como el asesoramiento técnico o financiero. Entre estas ayudas destaca el Préstamo Participativo de Creación de Empresas para Jóvenes de la Empresa Nacional de Innovación (ENISA), una empresa pública dedicada a la financiación de proyectos empresariales viables e innovadores de PYMES españolas.

Préstamo Participativo de Creación de Empresas para Jóvenes

ENISA ofrece unas líneas de financiación para jóvenes destinadas a aportar fondos económicos a iniciativas empresariales en distintas fases. La diferencia principal de estos préstamos respecto a la banca tradicional es que no se solicitan garantías ni avales personales, sino que solo es necesario un plan de viabilidad (eso sí, este debe ser contundente y bien articulado). A cambio del préstamo (cuyo mínimo es 25.000 euros y cuyo importe máximo es 75.000 euros), ENISA se hará con una participación de los beneficios de la empresa, además de ciertos intereses variables según la evolución de las cuentas. La edad es un factor determinante, ya que no podrán optar a este tipo de financiación ventajosa los emprendedores mayores de 40 años. Además, hay otros requisitos, como que la PYME esté constituida como sociedad mercantil en un máximo de 24 meses anteriores a la solicitud, o que la actividad principal y el domicilio social esté dentro del territorio nacional. Además, el proyecto no debe estar enmarcado en el sector inmobiliario o financiero y debe presentar un modelo de negocio o de producto innovador, con ventajas competitivas claras.

Otros tipos de ayudas para emprendedores

Al empezar un proyecto nuevo, lo más habitual es hacerlo bajo la figura de autónomo. Para los jóvenes que quieran emprender y partan de una situación de desempleo hay una serie de ayudas, diferentes según la Comunidad Autónoma, que promueven y facilitan esta figura, tanto para la creación de nuevas empresas como  para la incorporación de socios a empresas ya constituidas. Las mujeres también pueden recurrir al Programa de Apoyo Empresarial a las Mujeres (PAEM) o al Instituto de la Mujer, que ofrecen asesoramiento especializado a todas las mujeres que quieren emprender.  En cuanto a la ayuda económica, el PAEM ofrece Microcréditos con condiciones muy competitivas. Para el emprendimiento en el sector tecnológico, el Ministerio de Economía y Empresa abre regularmente varias convocatorias de diferentes programas en los que los emprendedores se pueden beneficiar de reducciones fiscales o de ayudas económicas.