Formar una empresa supone un proceso repleto de retos y aprendizajes, y los primeros pasos son esenciales para lograr el éxito. Entre otras cosas, se debe decidir entre las diferentes formas jurídicas que existen y cumplir la legislación asociada, que puede llevar aparejada la creación de un capital social. Saber qué es el capital social, cuándo es necesario y cómo calcularlo puede facilitar el arranque de un negocio.

Qué es el capital social y para qué sirve

El capital social de una empresa es el valor que suman las aportaciones de todos los socios. Estas contribuciones pueden haberse realizado en el momento de la constitución de la entidad o más adelante, y pueden ser dinerarias o no dinerarias (inmuebles, maquinaria, derechos de crédito…). Una de las principales diferencias entre un trabajador autónomo y una sociedad es que, al fundar una sociedad, la ley exige que los socios aporten dinero, bienes o derechos, los cuales pasarán a ser propiedad de la entidad. Estas aportaciones determinan la participación de cada socio en la sociedad: quien más aporta, más derechos obtiene. El capital social cumple tres funciones esenciales:
  1. Organización de la propiedad: Determina la participación de cada socio en la empresa, su capacidad de voto en la Junta General y su parte proporcional en los beneficios.
  2. Financiación inicial: Proporciona los primeros recursos económicos con los que la empresa comienza su actividad.
  3. Garantía frente a terceros: Actúa como respaldo frente a acreedores en caso de liquidación.
La Ley de Sociedades de Capital establece el capital social mínimo exigido para las principales formas jurídicas:
  • Sociedad de Responsabilidad Limitada (SL): Desde octubre de 2022, se puede constituir una SL con un capital social mínimo de 1 euro. No obstante, si este capital es inferior a 3.000 euros, se deben cumplir requisitos adicionales de responsabilidad y dotación de reservas legales para proteger a terceros.
  • Sociedad Anónima (SA): Requiere un capital social mínimo de 60.101,21 euros. Este capital se divide en acciones, que otorgan a los socios derechos económicos y políticos proporcionales a su participación.

Cómo calcular el capital social de tu empresa

El capital social no se calcula como una diferencia contable, sino que se determina por el valor total de las aportaciones iniciales de los socios, tanto dinerarias como en especie. Sin embargo, a efectos contables, se relaciona con el patrimonio neto de la empresa, que sí se calcula así: Activos – Pasivos = Patrimonio neto El patrimonio neto incluye:
  • Capital social
  • Reservas (como la reserva legal)
  • Resultados de ejercicios anteriores (beneficios no distribuidos)
  • Otras aportaciones de socios
Por tanto, si se desea estimar el capital social desde el balance, podría hacerse mediante: Capital social = Patrimonio neto – Reservas – Resultados acumulados Pero el valor real del capital social en el momento de constitución será el total de las aportaciones recogidas en los estatutos sociales.