Si quieres aprovechar todas las ventajas que te ofrecen las redes sociales para captar clientes, mejorar tu imagen de marca y llevar a cabo acciones de fidelización, lo más probable es que necesites un social media manager que se encargue de definir la estrategia a seguir.
Aunque son muchas las personas que en su día a día manejan sus redes sociales personales, esto no significa que estén también capacitadas para gestionar una cuenta de empresa. Las funciones de un social media manager son mucho más complejas y requieren de capacidad analítica, constancia y de un profundo conocimiento del ecosistema digital.
Aunque a veces se confundan ambos conceptos, las labores de un social media manager también van más allá de las un community manager. Mientras el social media manager se encarga de diseñar la estrategia para la empresa, el community manager es el encargado de ponerla en marcha (es decir, de hacer las publicaciones). Sin embargo, en muchas ocasiones las labores de un profesional y otro se cofunden o incluso son asumidas por una misma persona.
Las funciones de un Social Media Manager
-Entender el mercado, localizar a la competencia y estudiar sus comportamientos en redes sociales, los productos o servicios más destacados y el interés que generan.
-Determinación del público objetivo de la empresa y de las diferentes tipologías en las que este se puede segmentar, para así después dirigir cada una de las campañas a las personas que pueden mostrar más interés.
-Definición, conjuntamente con la empresa, de los objetivos que se buscan (reputación online, reconocimiento de marca, ventas, fidelización…), de la forma más precisa posible.
-Planificar una estrategia que cumpla con los objetivos, creando una guía para seguir en cada una de las redes sociales de la empresa, que incluya el número de publicaciones de cada red social, el tipo de contenidos, la frecuencia, el tono…
-Crear un documento que especifique cómo interactuar con los usuarios. Debe recoger las fórmulas que deben ser utilizadas y la manera de proceder en cada red social, así como las preguntas más recurrentes y sus respuestas, para agilizar las consultas y la atención al cliente.
-Preparar un plan de crisis que recoja el protocolo a seguir en caso de que la empresa se vea envuelta en algún asunto controvertido; y servir de apoyo y consulta si esta situación tiene lugar.
-Realizar informes y análisis periódicos para determinar cómo evolucionan las campañas propias y las de la competencia.
-Diseñar las campañas pagadas, el presupuesto destinado a cada publicación y la segmentación del público a las que están destinadas.
-Llevar a cabo estrategias para conseguir viralizar campañas publicitarias en redes sociales.
Las cualidades que debe tener un Social Media Manager
-Capacidad de planificación y gestión para organizar proyectos a largo y medio plazo
-Capacidad analítica para entender los datos extraídos de las redes sociales y reconducir las campañas en función de estos.
-Conocimientos de la cultura popular para conseguir conectar con los usuarios y sus intereses.
-Sentido común y templanza para conseguir reconducir las quejas, las opiniones negativas y las crisis de reputación.
En definitiva, al contratar a un social media manager debes buscar a un profesional que conozca las redes sociales como la palma de su mano, controle las herramientas analíticas y sepa cómo establecer y conseguir objetivos realistas con un timming real y sin atajos.