El DAFO se define como un documento en el que se detallan las Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades, en previsión de todos los tipos de escenarios a los que puede enfrentarse una tienda online. Se trata, en definitiva, de auditar todas las posibles circunstancias que pueden afectar al rendimiento de una tienda online, de modo preventivo y proactivo.
El DAFO tienda de ropa online será diferente del que se elabora para una tienda de bisutería o una que busca la venta de servicios. Pese a ello, te damos algunas de las claves para elaborar tu DAFO para tienda online.
¿Por qué hacer un análisis DAFO de ecommerce?
Todos los datos indican que crear un negocio ecommerce es una decisión estratégica positiva, en un momento en el que las ventas online no paran de crecer y en el que ya representan el 24% de las mismas.El objetivo de hacer un DAFO para tienda online es construir un marco preventivo en el que se puedan, por un lado, potenciar las fortalezas de un negocio y, por el otro, minimizar sus debilidades.
En un sector como el del ecommerce, en el que se producen cambios a grandes velocidades, sería incluso recomendable realizar un DAFO para tienda online cada año, teniendo en cuenta las transformaciones que han ocurrido y las que están por venir.
Así, crear un ecommerce es solo el primer paso para garantizar su éxito: las acciones para mantenerlo y promocionarlo son más que necesarias, y elaborar un DAFO se considera una de estas acciones.
Cómo recopilar información para el análisis DAFO
Para elaborar el documento DAFO, las empresas deben estar al día de la realidad de su industria y de los cambios a los que se enfrenta. Algunas de las informaciones clave a las que atender en este sentido incluyen:- Estar al tanto de cambios regulatorios o legislativos que pueden afectar al negocio.
- Tener en cuenta los vaivenes y transformaciones en la industria que podrían tener un impacto en el crecimiento del negocio (por ejemplo, la aparición de grandes empresas que pueden adueñarse de gran parte del mercado).
- Pedir feedback directo a los clientes para detectar qué se está haciendo bien y qué mal (a través de preguntas indirectas, encuestas…).
- Monitorizar las opiniones online que dejan los usuarios y los comentarios en redes sociales.